Y en el mismo momento que ocurre, cuando se produce esa
acción, ese gesto, ese quiero y no puedo. Ese instante donde sabes que nada
volverá a ser como antes, un final sin retorno a ningún lado. Recuerdas lo
bonito que fue, aquellos maravillosos momentos, añoras un tiempo pasado que fue
mejor. No se murió hoy, llevaba muerto mucho tiempo, pero igual que las
personas, estas no se van al despedirlas, se marchan al dejar de recordarlas. Sin
olvidar que al falso le pertenecen sus palabras incumplidas.
No hay rabia, ni ira suficiente, solo quien no quiere
escuchar y comprender, solo quien ve y no razona lo visto, solo el tiempo
perdido en conocer y que no te conozcan. No intentes hacer comprender a quien
nunca ha comprendido y mucho menos conocido. El manipulador te llevará a su
tierra y allí te dejará abandonado después del servicio prestado. Deberías
aprender a distinguir entre sentimientos y dudas, porque en las dudas no hay
cabida para el sentir.
Los egoístas te enseñaran el egoísmo de los demás y lo
maravillosos que son ellos, y las intenciones tan buenas que tenían, pero como
todo, son intenciones no sus planes. No hay mejor elemento de distracción que
señalar errores ajenos para evitar que los tuyos sean vistos. Te llevarás
aprendido todo lo enseñado, una pena que no pueda decir lo mismo.
Me alegra pensar que tu incomprensión eterna necesitará
explicaciones y no las tendrás, no hay nada que explicar a quien nunca ha
querido comprender. Ya ha habido suficiente tiempo perdido en explicaciones. Tantos
libros leídos y nunca has aprendido a leer entre líneas. Recuerda que quien te
anima a ser independiente, a ser emprendedor, a luchar, a no tener miedo, a
confiar en ti, a saber que eres tu contra el mundo, a saber que quizás no
tengas a nadie pero siempre te tendrás a ti misma y el valor de afrontar la
vida. Recuerda que quien te enseña todo eso te quiere en cualquier sitio menos
lejos.
Saber lo que alguien quiere sin que tenga que ser mencionado,
es una cualidad que solo algunas personas poseen. Mucho se aprende de leer, pero de
escuchar se aprende todavía más, pero donde nunca hubo interés jamás habrá
aprendizaje.
Que te vaya bonito.
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