No te conozco

¿Donde estas? ¿Por que no vienes? Es verdad no te conozco, no se apenas nada de ti, solo te haces rogar, en mi mundo. Y no se por que me suscitas curiosidad. Me gustaría saber que pasa por tu cabeza. ¿Por qué tan pronto estas aquí y de pronto dejas de estarlo? ¿Por qué haces paréntesis en el tiempo?
Creo que te escondes, por que te vienes abajo, creo que eres una pared, una pared que algún día se derribara. Una pared donde se pintara una puerta para poderla pasar. No quieres que nadie te vea cuando estas mal, como cuando te avergüenza llorar delante de la gente. Quieres que siga siendo así, una intimidad contigo misma. Como esa persona que tiene miedo a enamorarse, por los palos que le han dado, miedo a coger cariño a la gente, por que sabes que en poco tiempo la dejaras de ver.

Pero todo eso es inevitable, solo demoras la espera, por que sabes que eso acabara ocurriendo. Solo haces que el tiempo se alargue, creando una lucha entre la cabeza y tu corazón, entre el camino y la meta. Solo pones trabas a tu lugar en el mundo.
La vida sigue, a veces los cambios son tan bruscos, que no quieres aceptarlos, no quieres pensar que esa etapa se acabo. Pero deja que la vida siga.
Deja que todo te sorprenda, como cuando todos es nuevo, aunque no lo sea, aunque todo sea similar a un algo anterior. La primera vez siempre es la mejor (vale no siempre), pero por ello la segunda no ha de ser peor.

Cuenta con la gente, desahógate, muéstrate como eres, no te escondas, se tu. Simplemente aparece, y marca a las personas, no tengas miedo. Decide que pieza quieres ser en tu puzzle, pero no seas una pieza bocabajo.

La vida es un constante entrenamiento para hacer cada día mejor. No te quedes en lo que fue y en lo que pudo ser.